miércoles, 24 de agosto de 2016

Desnutrición infantil en Argentina

De acuerdo con el último informe de estadísticas vitales, las víctimas fallecidas eran de todas las edades, aunque aclaró que el 70% eran mayores de 75 años. Asimismo, reflejó que los menores de 19 años representan el 8%. En total, en 2013 murieron 891 personas. En 2003, moría por desnutrición una persona cada 5 horas, lo que supone 1.787 en el curso de ese año.


Causas:
De igual forma, el estudio detectó que la sub alimentación severa se da más en hogares precarios, y en los últimos años aumentó entre la población que vive en villas o asentamientos. Allí el riesgo alimentario infantil tiene un carácter estructural y está muy por encima del 25%.



En este tiempo, en la Argentina, la desnutrición es una de las causas más dramáticas e inconcebibles de mortalidad infantil.
Y lo más complejo es que no existe de un solo tipo. Hay varias formas de desnutrición infantil que avanzan y se instalan en poblaciones vulnerables y rodeadas de extrema pobreza como un mal silencioso.
 Allí se suma la confusión con las estadísticas y la dificultad de construir en el caso argentino un mapa de la desnutrición infantil para atacar este flagelo para siempre.

La desnutrición severa o aguda, esa que fulmina y provoca la muerte de un niño en edad temprana de su vida, antes de los dos años, al decir de los especialistas es la punta del iceberg de un tema que pone en primer plano los derechos humanos de las personas y a la vez evidencia un problema endémico mayor: estas otras formas de desnutrición, más solapadas y crónicas, que comprometen el capital social de un país.


Resultado de imagen para desnutrición infantil dibujos


No es sólo la pobreza la que ha arrasado el país, llegando a sumergir en la miseria a la mitad de la población. Los hogares pobres son aquellos que sus ingresos son insuficientes para adquirir la canasta básica de alimentos más algunos gastos del hogar, transporte y vestimenta. 

Los hogares en situación de “indigencia” son los que no ganan ni siquiera para pagar una canasta básica de alimentos “necesarios para satisfacer los requerimientos mínimos de los miembros del hogar, que le suministren las calorías necesarias para realizar los movimientos moderados”, según el concepto de la OMS.



Consecuencias: 
Los más afectados por el hambre terminan padeciendo lo que los especialistas llaman el “marasmo”, un cuadro caracterizado por “la pérdida de grasa subcutánea, intensa atrofia muscular y de otros órganos. Tienen la cara triste y arrugada, como la de una persona mayor”.

La carencia genera “una angustia permanente”, provocada por la incertidumbre. 




Resultado de imagen para desnutricion infantil



“No saber que va a pasar al día siguiente, si va a tener algo para comer o no, puede dar lugar a la violencia, lo vemos en la sociedad, aunque la relación no es directa. Puede dar lugar a cualquier tipo de actividad para encontrar ese sustento, hasta el robo en los adultos”opinó Ageno, quien alertó: ” Cuando el límite entre la muerte y la vida ha desaparecido, qué importa morir de hambre o delinquiendo”.